¿Qué es Docunati, por qué se creó y quién es el autor?

¿Quién soy y cuál es el propósito de esta propuesta?
Como que cualquier sitio web o un simple texto en Internet tiene el propósito de comunicar es necesario que el autor comprenda que del otro lado están los lectores quienes merecen respeto, algo que traduzco como la consideración de presentarme, desarmado de toda vanidad y con la esperanza de hacer un poco comprensible mi propuesta. Desde el punto de vista legal soy el único autor de Docunati, por el momento, un sitio web en el que me presento como una especie de viajero aventurero y en el que promuevo el consumo de documentos de todo tipo, dígase libros, revistas, discos, DVD, etc. Aclaro que esto no quita la posibilidad de que algún día promueva otros productos.
En este momento estoy en Estados Unidos de América, en el estado de Texas y específicamente en la ciudad de Dallas. Por escribir en español no habrá que discernir si soy o no un latino. De hecho soy uno más del montón que suman millones dentro de los que buscan el sueño americano. Para diferenciarme les digo que en mi caso busco mi propio sueño, en un país lleno de problemas pero que permite hacerlo, y creo haberlo encontrado a los 63 años, punto en el que a pesar de múltiples achaques, que feamente se dice de viejos, me encuentro espiritualmente fuerte como un potro semental que mira la pradera con ansias de correr.
Mi espíritu quijotesco manifestado en mi constante deseo de enderezar entuertos es mi rasgo fundamental de carácter. Pero, aunque no me ha llegado la iluminación o alguna candanga por el estilo, creo haberme encontrado a mí mismo, y al final ya viejo y cansado, darme cuenta que el único camino que llevará al hombre a su destino es la paz. De esta manera, a partir de este post y si Dios me lo permite por muchos años, seré un promotor de la no beligerancia y la comprensión de los humanos, los unos con los otros.
En mi sangre se reúne (con prueba documental) el asiático, el africano y el caucásico. Posiblemente tenga algo de indígena americano pero no lo tengo comprobado. Mi "cosmopolismo" sanguineo tampoco tiene nada de extraordinario; simplemente soy caribeño. Digo esto con el ánimo de hacer comprender que nada de racismo podrá empañar mis intensiones y tareas. Tampoco me moverá nacionalismo chovinista por más orgulloso que me siente de haber nacido en una isla rodeado del mar y tener el corazón lleno del colorido de un país extraordinario que se llama Cuba. El haber permanecido en Dallas ha contribuido al sentimiento de que el ser humano se mide solamente por su posición actuante con relación al bien y el mal. Aquí he conocido a personas de casi todas las naciones del planeta para concluir que los buenos y los malos se dan en todas las naciones y por eso los amigos y enemigos siguen el mismo principio.
Este post se trata de tres sujetos: Docunati, Dallas y yo:
Docunati
Este sitio es uno de más de cien intentos de crear un espacio en Internet que me permitiera el propósito de viajar obteniendo cierta ganancia. Estos intentos se han realizado durante siete años consecutivos. Soy profesional, por eso y por la mala propaganda de los que se dedican a promover sitios web y comercio online al principio creí que era tarea fácil. Tengo que reconocer que el emprendimiento online es tarea hercúlea y yo soy un simple mortal, sobre todo porque no tengo esa piedra filosofal del primer paso que se traduce a no tener pecuñas para comenzar pagando promociones.
No me siento triste y mucho menos derrotado y es por eso este último y quizás definitivo intento que es Docunati, que hoy se encuentra en trabajo de parto. Gracias a Dios los hombres podemos parir tan siquiera obras intelectuales y con ello competir sin alcanzar la excelsa habilidad natural que la Creación le dio a la mujer. La web se trata entonces de mi hija unigénita, sin que su autor se crea deidad a pesar de que Moisés dijera que éramos creados a imagen y semejanza de Dios. Y todo, porque se nos permitió comer del árbol de la sabiduría pero no del de la vida eterna.
Para darle un nombre a este sitio escogí la palabra Docunati. Docu se refiere a documentos que es lo que promuevo para vender, y nati a mi hija Natalia, la cual honro aquí. Ella, mi descendencia plurigénita, o sea engendrada con la colaboración amorosa de su madre, es la heredera de este trabajo.
La web se divide en dos aspectos que a la fuerza trataré de articular: una tienda online de referencia, donde yo particularmente no vendo nada sino que los envío a los proveedores directamente a los cuales ustedes le comprarán en sus propias plataformas, por lo que no hace falta crear términos y condiciones ya que no uso una pasarela de pago de mi propiedad. La otra es este blog que llamo "Viajando y leyendo" que será un embrollo inaudito de mis lecturas y mis viajes. Lo único que queda prohibido es copiarlo enteramente y publicarlo.
El blog sale inmediatamente que se llega a la página home de Docunati pero para entrar en la tienda y adquirir algún libro u otro documento deben incursionar en el menú, que en el caso de estar navegando en una computadora siempre estará a la izquierda de la página pero si han llegado hasta aquí con un celular o cualquier otro dispositivo que use sus software tendrá que hacer clic en el cuadrito de la parte superior derecha.
El menú es desplegable en intento de hacerlo intuitivo, con las dificultades que trae querer ser original y respetar los derechos de autor de otras personas y las limitaciones de meter tantas cosas en el espacio que me deja el formato web. Algunos anuncios son buscadores por lo que pueden hacer sus propias búsquedas sin tener en cuenta lo qué se le propone predeterminadamente.
Hemos escogido los libros como promoción inicial, no porque tengamos esperanza de obtener ganancias rápidamente sino porque a lo largo de los siete años de aprendizaje que llevo en este campo y de los sesenta y tres aprendiendo en la vida me he dado cuenta que el amor debe estar al principio, en el medio y al final de la obra. Yo amo los libros más que cualquier otro producto de los que dejan un margen más alto de ganancia en el comercio online, además soy un lector empedernido. Es un negocio donde ya hay muchos sitios establecidos y por tanto la competencia es con gigantes.
Blog
El blog es una consecuencia de ser yo mismo. Yo sé adonde voy porque no tengo una nave espacial por tanto mi viaje se dará dentro de este planeta. Mi camino de la Mancha estará limitado por un concepto nada romántico que adquiere muchos nombres según la geografía en que nos encontremos: dólar, euros, pesos, libras, dinares, rupias, etc. Si me respetan la fea postural de citarme a mí mismo y se acuerdan de que más arriba me refería a mi carácter quijotesco comprenderán fácilmente de que no tengo un centavo partido por la mitad para empezar este emprendimiento. Sin embargo tengo a Natalia que todavía es menor de edad y tengo mis sueños que ya son mayores de edad, así que lucharé por sacarle algunas monedas a este proyecto afiliándome a los mayoristas. Solo me adhiero a grandes y reconocidas tiendas por razones de tiempo, osea, aquellas que me otorgan banners y widgets listos para el comercio online.
Un blog tiene que tener un tema y viajando y leyendo une dos cosas que pueden ser difíciles de articular dentro del contexto de un supratexto (con el permiso de Roland Barthes). No queda de otra que irles contando de los viajes en unas ocasiones y en otras irles hablando de libros. Así que estoy ofreciendo disculpas anticipadas a los lectores que vean cierta esquizofrenia racional del contenido que se subirá en el desarrollo: unas veces describiré los viajes y otras hablaré sobre libros.
Dallas
Cuando me decidí definitivamente a elaborar este proyecto y me di cuenta que yo nací para viajar estoy residiendo en Dallas. Antes había vivido en Newark, Nueva Jersey, casi a la sombra de los rascacielos de Nueva York, que me quedaban a quince minutos en auto y un poco más en el tren que era el modo de moverme allá. De manera que esta historia se cuenta a partir de la ciudad de Texas en la que construí el proyecto definitivamente.
Dallas es un buen lugar para empezar. Es una ciudad extraordinariamente grande y enormemente sorprendente para un campesino nacido en Cuba en un poblado perdido entre las montañas orientales llamado Puriales de Caujerí y que vio su adolescencia en la ciudad de Guantánamo, calificada por el propio Fidel Castro como el tercer mundo del tercer mundo.
En las primeras partes de mi aventura he viajado por esta inmensa ciudad, en bicicleta y mediante el transporte público. Tengo mucho que contar y se lo entregaré en los próximos días. Conocerán acerca de las cosas buenas y malas de una de las ciudades más ricas de Estado Unidos, desde los lugares exquisitos hasta donde viven los sin casas. Les aseguro de que este pueblo, teniendo en cuenta el Metroplex es mucho más que el Dallas original y el oficial. No se asombren de que esté hablando de otras ciudades limítrofes que estuvieron a mi alcance.
Yo, el autor de Docunati
Mi egocentrismo se pone a prueba cuando tengo que hacer cosas para los otros. Pero soy yo y existo, como existe usted apreciable lector, y somos únicos e irrepetibles. Nos merecemos nuestros sueños aunque sin joder al otro.
El hecho de escoger el camino de los libros y los textos para encontrar soluciones, en un país lleno de oportunidades económicas, se debe a que a pesar de ser campesino la vida me llevo a ser trabajador intelectual por cuarenta años. Amé lo que hice y no puedo renunciar a lo fui como tampoco renuncio al crecimiento humano y la dosis de modestia que me han dado siete años limpiado cocinas, botando mierda de perros y finalmente vendiendo helados de manera ambulante en Dallas. Toda experiencia me ha hecho crecer para mirarme a mi mismo desde la perspectiva espiritual alcanzada y darme cuenta de que soy un enano, aunque tengo la autoestima alta.
Mi deseo de viajar es un trauma de la infancia pero como amaba lo que hacía cuando viví de maestro hasta profesor universitario con todas las categorías docentes no me aventuraba. Además el sistema económico del país y las regularidades políticas hacían imposible viajar, al menos por mi cuenta. Cuando salí hacia el Gigante Gringo, lo hice para satisfacer el deseo de conocer familiares muy importantes y para lograr una alimentación adecuada a una enfermedad nutricional que reclamaba mi vida y cuando menos mi motricidad. Casi había renunciado a viajar y me debatía el día anterior entre si me quedaba en USA o regresaba. Esa tarde estaba acostado tomando fresco al lado de mi hija de siete años había un silencio entre ella y yo, como si ambos supiéramos el tamaño dolor de separarnos que tendríamos al otro día. Entonces ella habló para decir solamente esto que me hizo separarme para llorar.
-Papa, tú te vas mañana y me deja aquí y tú sabes que yo quiero conocer al mundo.
Hoy Natalia tiene 15 años y va para el liceo que allá se llama preuniversitario, he oído que desde pequeña le gusta la poesía pero quiere estudiar medicina, que es en ese país una de las de más prestigio social. Ella va hacia adelante caminando como los caballos triunfadores, en este caso mi hija es todavía tierna potranca, mientras yo voy ya hacia atrás como el cangrejo, pero sin darme por vencido.
Yo sé, por experiencia en mi propia piel interna que ella será una buena profesional, que disfrutará de su carrera pero que no viajará más allá de salvar vidas o alguna misión internacionalista que le otorguen por necesidad de algún otro país del tercer mundo más tercermundista que el mío. La apoyaré en lo que parece ser su destino y será libre de pensar como quiera en cualquier dimensión de la vida.
Aunque jamás estaré conforme con la falta de democracia y mucho menos con las tiranías he renunciado a enderezar esos entuertos para acogerme a la promesa que Cristo, el Mesías, nos dejó a los que optemos por la paz. De manera que por donde pase respetaré los gobiernos tal y como son y si en algo no estuviere de acuerdo oraré. Si algo pudiera mejorarse en algún conglomerado humano por algún aporte mío será de manera pacífica sin compromisos ni intereses políticos. Si en algún lugar mi presencia no fuera bienvenida sacudiré el polvo y seguiré a otro sitio.
Aquí dejo los textos bíblicos que sirven de de guía para inspirarme en esta decisión sin retroceso de mi vida:
Las bienaventuranzas
Lucas Capítulo 5
20 Volviendo su vista hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios. 21 Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis. 22 Bienaventurados sois cuando los hombres os aborrecen, cuando os apartan de sí, os colman de insultos y desechan vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre. 23 Alegraos en ese día y saltad de gozo, porque he aquí, vuestra recompensa es grande en el cielo, pues sus padres trataban de la misma manera a los profetas. 24 Pero ¡ay de vosotros los ricos!, porque ya estáis recibiendo todo vuestro consuelo. 25 ¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados!, porque tendréis hambre. ¡Ay de vosotros, los que ahora reís!, porque os lamentaréis y lloraréis. 26 ¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros!, porque de la misma manera trataban sus padres a los falsos profetas. 27 Mas a vosotros los que oís, digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; 28 Bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian. 29 Y al que te hiriere en la mejilla, dale también la otra; y al que te quitare la capa, ni aun el sayo le defiendas. Y cualquiera que te pidiere, da; y al que tomare lo que es tuyo, no vuelvas a pedir. 31 Y como queréis que os hagan los hombres, así hacedle también vosotros: 32 Porque si amáis a los que os aman ¿qué gracias tendréis? También los pecadores aman a los que los aman.
También Mateo 5;9
9 Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Todo cual me guiará en mi aventura proviene de un texto categórico y generalizador que lo resume todo y helo aquí:
Mateo 22:36-40 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
36 Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley?
37 Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
38 Este es el primero y grande mandamiento.
39 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
40 De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.