Tus palabras

¿Quién iba a creer que las palabras tienen aroma?
Un vientecillo desde Bogotá
Ha acariciado
Mis torpes orejas hoy
Y he sentido el olor de las palabras
Que ni en las cortes de reyes poderosos
Puede ser tan tierno y suave
Como si el aroma fuera
Secretos de la alquimia
Mezclados con los misterios del amor.

Tus palabras las he encerrado en frascos
De cristal de bohemia
Las he envuelto
En terciopelos de caravanas de beduinos
Y en baúles de la Francia
He metido el envoltorio
Y con siete candados las he encerrado
Para que no se escapen de mi mente.

Al despertar mañana
Abriré el misterio para volver a olerlas
Y las ofreceré en incienso a la Deidad.

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